jueves, 26 de julio de 2012

Evita y Cristina: una misma pasión, una misma lucha


por Oscar Gatica

En el video podemos observar parte de la vida y la obra de Evita, de sus inquietudes sociales y políticas, que las tenía aún antes de conocer a Perón en el año 1944.

En su libro, La razón de mi vida, Evita nos relata: "He hallado en mi corazón, un  sentimiento fundamental que domina desde allí, en forma total, mi espíritu y mi vida; ese sentimiento es mi indignación frente a la injusticia".

También memora lo que ella califica como su día maravilloso. "Para mí fue el día en que mi vida coincidió con la vida de Perón". Evita recuerda que le dijo: "Si es como usted dice, la causa del pueblo su propia causa, por muy lejos que haya de ir en el sacrificio, no dejaré de estar a su lado, hasta desfallecer". Y vaya si cumplió con su palabra. Evita dio la vida por su pueblo, el 26 de julio de 1952, falleció a los 33 años de edad.

Perón, después de haber desarrollado durante dos años ―desde la Secretaría de Trabajo y Previsión― una activa tarea en defensa de los intereses de los trabajadores, es detenido y llevado preso a la isla de Martín García. En esa ocasión le escribe una carta a Evita donde le dice: "En cuanto salga nos casamos […] y nos vamos al Chubut los dos". Perón pensaba alejarse de los militares golpistas que el 13 de octubre lo habían encarcelado y vivir en el sur una vida más calma. Días después, el pueblo trabajador produce el 17 de Octubre; entonces la historia de Perón, de Evita y del pueblo argentino toman otro rumbo.

Cristina ―si bien en tiempos distintos― tiene varias cosas en común con Evita. Ella conoció a Néstor en una pensión de estudiantes universitarios en La Plata, el 21 de septiembre de 1974. Ese día cambió su vida para siempre. Fue su día maravilloso, diría Evita. Desde entonces Cristina y Néstor no se separaron nunca más. Similar propuesta a la que Perón le hizo a Evita, Néstor le realizó a Cristina. En mayo de 1975 se casaron, y exactamente en la fecha que se cumplía el 24 aniversario del fallecimiento de Evita, el 26 de julio de 1976, se fueron a vivir juntos al sur, a Río Gallegos. Buscaban poner distancia con la represión ilegal de la dictadura cívico-militar instalada el 24 de marzo.

Evita explica su amor a Perón con estas simples palabras: "Nos casamos porque nos quisimos, y nos quisimos porque queríamos la misma cosa"; "Por eso nos casamos, aún antes de la batalla decisiva por la libertad de nuestro pueblo" (antes de las elecciones de febrero de 1946 que proclamaron a Perón Presidente por primera vez). Se casaron por civil en Junín el 22 de octubre de 1945, y por iglesia, dos días después, en La Plata.

Cristina conoció a Néstor en La Plata (ciudad que hasta 1955 se llamó Eva Perón) y se enamoró de él por su personalidad desbordante, su humor, su inteligencia y, también, por cómo defendía sus convicciones. El amor nació al calor de la militancia. Eran militantes peronistas en la Universidad. Cristina ha definido a Néstor como "mi compañero de vida y militancia". También podría haber dicho como Evita: "Nos casamos porque nos quisimos, y nos quisimos porque queríamos la misma cosa".

Más allá de estos entrelazamientos históricos en la vida de Perón y Evita, de Néstor y Cristina, existe una coincidencia mucho más importante. Perón, después de la muerte de Evita, siguió la obra que habían iniciado juntos. Cristina, después de la muerte de Néstor, sigue adelante con el proyecto político que habían iniciado juntos. Ellos fueron militantes apasionados de una causa: la causa del pueblo, como llamaba Perón a la lucha por la justicia social, la independencia económica y la soberanía política. Y eso puede verse cuando Perón y Evita hicieron realidad los derechos sociales para los humildes de la Patria, para los trabajadores, para los ancianos, para las mujeres, para los niños. Eso mismo pudimos verlo y vivirlo ―otra vez― desde el año 2003 con Néstor, y desde 2007 con Cristina, ambos hicieron realidad la recuperación de los derechos que habían sido pisoteados durante la década del 90, devolviéndonos, de esa forma, la dignidad y el orgullo a los argentinos. Salimos del infierno y comenzamos a construir una Patria para todos.

Evita enfrentó a los poderosos, a los oligarcas, al capitalismo internacional, a los que no tienen Patria ni bandera, según sus palabras. Y Cristina enfrentó a esta nueva oligarquía de la Mesa de Enlace en el año 2008. Y sigue enfrentando a los poderosos de este tiempo, al FMI, al capitalismo financiero internacional y a las corporaciones dueñas del poder económico y de los medios de comunicación.

Para ser breves y finalizar este aporte recordando a Evita, invitamos a los presentes a que cuenten alguna anécdota que hayan vivido o conozcan sobre Evita. Como cierre a esta introducción traeremos a la memoria algunas frases de Evita, que también pueden servir para realizar algún comentario o reflexión. Dijo Evita:

"Cuando elegí ser Evita, sé que elegí el camino de mi pueblo".

"Donde hay una necesidad, existe un derecho".

"Nuestra Patria dejará de ser colonia, o la bandera flameará sobre sus ruinas".

"El Peronismo será revolucionario, o no será nada".

"Renuncio a los honores, pero no a la lucha".

"Yo no me dejé arrancar el alma que traje de la calle".

"Cuando ellos me critican a mí, lo que en el fondo les duele, es la revolución".

"Yo sé que ustedes recogerán mi nombre, y lo llevarán como bandera a la victoria".

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